Nuestros principios


Apostamos, como profesores, por transmitir conocimientos, habilidades y competencias de la manera más efectiva posible, concentrar esfuerzos para conseguir la excelencia de nuestros alumnos, trabajar desde la neutralidad ideológica para con ellos y que se eduquen en un sistema que respete sus derechos lingüísticos.


  1. Instrucción como objetivo fundamental de la enseñanza
Lo que es característico de un centro educativo, y que lo distingue de cualquier institución o asociación con fines de cohesión social, es la transmisión de conocimientos, habilidades y competencias.
                                  
  1. Cohesión social como una consecuencia de la instrucción
Se ha desterrar la pretensión de considerar la educación y los centros de enseñanza como privilegiados medios para lograr la cohesión social. Este principio permite la nefasta “ingeniería social”, a la que se han dedicado intensamente durante las últimas décadas gobiernos nacionales y autonómicos. La cohesión social se consigue como una consecuencia de una correcta instrucción, no al revés.

  1. Neutralidad ideológica
Los profesionales docentes trabajan con menores de edad y han de procurar no trasladar sus convicciones ideológicas o políticas a los alumnos y rechazar todo intento de adoctrinamiento, propaganda política o apoyo a acciones políticas que tengan como objeto los alumnos.

  1. Excelencia y éxito académico
Todo centro de enseñanza debe perseguir el éxito escolar, éxito entendido de forma ponderada, teniendo en cuenta puntos de partida y condiciones socioculturales de la población escolar

  1. Autonomía pedagógica y de recursos humanos
Los centros han de tener autonomía pedagógica para alcanzar el objetivo del éxito académico. Además, la autonomía pedagógica se ha de complementar con la autonomía en la disposición de los recursos humanos necesarios para conseguir el éxito.

  1. Responsabilidad
Los centros tienen responsabilidad en el éxito o fracaso escolar. La tentación de desviar la responsabilidad del fracaso a las familias, al entorno o a las consideraciones socioeconómicas, oculta casi siempre la irresponsabilidad en la que la educación se ha movido durante muchos años.

  1. Medición externa
El reverso necesario de la autonomía es la medición externa de resultados. Sólo los sistemas irresponsables prescinden de la medición externa. España ha tenido que recurrir, para conocer el nivel académico de sus alumnos, de sus centros y de sus autonomías, a pruebas externas internacionales (PISA, PIRLS, TIMMS), porque ha sido incapaz de elaborar evaluaciones externas objetivas y comunes.

  1. Profesionalización docente
El éxito o fracaso ha de conllevar el reconocimiento profesional de los centros, de los equipos directivos, de los equipos docentes, de los profesores.

  1. Respeto a los derechos lingüísticos
Los alumnos de las Islas Baleares tienen el derecho constitucional de estudiar en las dos lenguas oficiales de la comunidad autónoma. Este derecho, que como tal es inviolable, no se garantiza actualmente, a pesar de las numerosas sentencias de los tribunales Supremo y Constitucional.