miércoles, 5 de abril de 2017

No es la lengua, estúpidos

Álvaro Delgado

5 de marzo de 2016



Quiero comenzar este artículo con una explicación para que nadie se sienta ofendido. Aunque les haya sorprendido el título, amables lectores, no pretendo insultarles. Se trata de un remedo de la famosa frase de asesor de Bill Clinton en la exitosa campaña presidencial norteamericana del año 1992, en la que derrotó a George Bush padre. La expresión «es la economía, estúpido», con la que el equipo de Clinton proponía medidas contra la dura recesión que afectaba entonces a los Estados Unidos, se convirtió en un referente en el marketing político y ha sido desde entonces una de las frases más repetidas por los expertos del mundo económico.