jueves, 14 de enero de 2016

March, el acosado

Fernando Merino
El Mundo/El Día de Baleares, 13 de enero de 2016
 
EL CONSELLER d'Educació Martí March, lleva seis meses padeciendo el acoso de sus socios de Pacte de Progrés. Primero los tambores de huelga sonando desde una Assemblea de Docents que por mucho que se maquillen no deja de ser la guardia pretoriana de los pesemeros, y por eso mismo conscientes de que, alcanzar el soberanismo, pasa por el lavado de cerebro en la escuela pública. Para ello, qué mejor sino ir a reclamar más medios bajo amenaza. 


 Medios, por supuesto, consagrados a darle de comer a sus ambiciones, que pasan por seguir sumando comisarios a la causa. March, que sobre el papel es el político mejor preparado que ha pasado por ese despacho, va y afloja. 

En su programa electoral, Ciudadanos se cuestionaba por qué los docentes de la escuela pública han de ser funcionarios, y no los de la concertada. No le faltaba razón al partido que preside Albert Rivera. Los de la Assemblea, se saben fuertes, precisamente por su condición intocable: son funcionarios, y de paso exhibiendo a las bravas su odio indisimulado al diferente.

Interpreto, que la idea central de Ciudadanos era acabar con los privilegios de unos docentes parapetados en su condición de servidores públicos, para hacer y deshacer a su antojo, sin importarles una higa los malos resultados. 

Ahora llega el turno de Podemos con sus pretensiones de acoso y derribo a la escuela concertada, supuestamente por su inquebrantable defensa de una enseñanza laica, o sea aconfesional. Porque sabido es que la iglesia católica es propietaria mayoritaria de los 113 centros de educación concertados que existen en Baleares. Así pues, de los verdes con trenzas al jarabe de Jarabo.

En esas al enemigo ni agua. Ni becas de comedor, además de un control sin contemplaciones, preferentemente férreo, que va más allá de lo que dicta la ley. Curiosa escrupulosidad doctrinaria la de los podemitas, tan laicos ellos, a pesar de sus vínculos con un Estado confesional como Irán que parece ser la UDEF acabará confirmándonos ha regado con cinco millones de euros al marxismo leninismo (extremada antigualla) de los podemitas.