martes, 13 de enero de 2015

“PLIS. Educación por favor” se ha reunido este martes, en ausencia de Núria Riera, con el director general de educación, al que ha pedido coherencia, transparencia y un gobierno ajeno a los cálculos electorales.

La asociación de profesores declara que el nuevo giro dado por Nuria Riera, sólo preocupada por la paz en las aulas antes de la cita electoral, ha dejado a los centros en la misma atonía, falta de planes de excelencia e inexistencia de libertad lingüística que en la época del Pacte.

Palma,  13 de enero de 2015
Eco en ABC



La asociación de profesores se ha mostrado convencida de que la Consellera de Educación ha fijado una hoja de ruta hasta las elecciones que consiste en recuperar urgentemente la paz social y no gobernar, dejando en los centros un preocupante vacío de poder, que ha ocupado la Asamblea de Docentes. Esta hoja de ruta supone una dejación grave de funciones y de responsabilidad del gobierno.Ha denunciado que en los centros se infringe la ley al permitirse claustros que toman decisiones sobre asuntos ajenos a las competencias legales de los claustros, con total indiferencia por parte de la conselleria. También le ha hecho saber que muchos directores han tomado decisiones sin amparo legal, como recuperar el decreto de mínimos. A pesar de que se han cursado denuncias de estas infracciones ante la inspección y ante la conselleria, ni la inspección ni la conselleria han tomado hasta el momento cartas en el asunto, limitándose a guardar silencio y a no informar a los denunciantes de la tramitación de sus denuncias.
Ha  hecho hincapié en la inoperancia de la Inspección Educativa, que no actúa cuando se infringe la ley y que no sólo no tramita las reclamaciones que ante ella se presentan sino que nunca informa  a los denunciantes.

En cuanto al bilingüismo, PLIS. Educación, por favor, ha transmitido su malestar porque la inmersión lingüística obligatoria sigue vigente en la mayoría de los centros y por la renuncia de la Conselleria a defender los derechos lingüísticos de los alumnos y por no atender los recursos de los padres que reclaman la aplicación del TIL, de acuerdo con la sentencia del TSJIB, y la aplicación de lectoescritura en castellano en educación infantil y primer ciclo de primaria. Reclamar la normalización del castellano como lengua vehicular sigue siendo con este gobierno una acción propia de héroes solitarios.Especialmente, le ha reciminado a la conselleria que haya abandonado su obligación de defender e imponer el TIL en los centros con proyectos lingüísticos aprobados antes del 24 de septiembre y que no haya fijado un marco normativo nuevo para los proyectos lingüísticos no aprobados antes del 24 de septiembre, marco normativo que no puede ser nunca el decreto de mínimos, ya que la LOMCE lo ha derogado de facto, al anular el requisito fundamental de su aprobación por el consejo escolar.; .

Le ha transmitido la necesidad de que la LOMCE se aplique en los plazos previstos. Cualquier dilación en su aplicación es una setencia de muerte de una ley que, a juicio de PLIS, a pesar de evidentes defectos, es mucho mejor que la ley anterior.

Le ha exigido que defienda con claridad una política educativa no ideologizada, la búsqueda de la excelencia educativa que se refleje en los resultados académicos, el liderazgo directivo en la autonomía pedagógica y de recursos humanos,  la responsabilidad de los equipos directivos en el éxito o fracaso escolar de los alumnos, la rendición de cuentas,  la defensa de la normalización vehicular de las dos lenguas oficiales, la pofesionalización del departamento de orientación, etc.

Aunque PLIS se ha mostrado escéptico con sus promesas, el director general se ha comprometido a pedir a Inspección educativa un informe detallado de todas las reclamaciones y denuncias que obran en su poder; a ser transparente en la tramitación de los mismos; a recordar a los directores de los centros que los claustros no pueden votar nunca cuestiones ajenas a las competencias que les adjudica la ley; a recordar a los directores que la autonomía se ha de desarrollar siempre de acuerdo a un marco normativo;  a hacer cumplir los derechos lingüísticos de los alumnos y padres; a garantizar la implantación del trilingüismo para el curso que viene; a no dilatar la aplicación de la LOMCE.

El director general no se ha comprometido, en cambio, a de defender el TIL en los centros con proyecto aprobado antes del 24 de septiembre y a redactar un marco normativo nuevo para los proyectos lingüísticos no aprobados antes del 24 de septiembre.