29 de enero de 2024.
TV El Toro entrevista a Julián Ruiz-Bravo, secretario de PLIS.
Aquí un resumen:
El gobierno balear del PP sigue la estela del nacionalismo y no parece interesado en acabar con la inmersión obligatoria. Los centros escolares de Baleares están dominados o controlados por el nacionalismo y la izquierda nacionalista, como es el PSIB-PSOE.
No se entiende que el gobierno balear haya rechazado la petición de alumnos de recibir en español al menos el 25% del horario lectivo, y en al menos en una materia de las llamadas troncales, y un máximo dl 50%. Los criterios pedagógicos se ignoran con la inmersión obligatoria.
Un alumno con retraso madurativo o con graves deficiencias de aprendizaje no pueden estudiar en la lengua que mejor comprenden, si esta es el castellano. A los alumnos recién llegados hispanohablantes no se les da la oportunidad de un primer curso puente en castellano.
A los alumnos hispanohablantes recién llegados, se les saca de matemáticas, historia o filosofía para recibir clases de catalán, priorizando la lengua y no el aprendizaje. La escuela no está para aprender una lengua o más lenguas, sino para adquirir un nivel culto del idioma.
Solo se puede dominar el registro culto de un idioma si este es vehicular de enseñanza. Lengua que no es vehicular de los 0 a los 18 años queda invalidada como lengua de cultura y se convierte en lengua de calle.
No hay manera de saber el nivel académico de los alumnos, ni en idiomas ni en ninguna materia no lingüística: no existen evaluaciones externas y comunes en toda España. Las escuelas son una caja negra, en la que entran y de la que salen alumnos sin saber qué ha pasado dentro.
Entre un 25% y un 30% de los alumnos acceden a primero de secundaria sin leer de corrido, sin comprender lo escrito y sin escribir correctamente. En resumen: dando caña.